La varilla roscada negra es una opción económica y resistente para una variedad de aplicaciones de fijación y anclaje. Aunque tiene una buena resistencia mecánica y es adecuada para la mayoría de las aplicaciones de construcción e industriales, su susceptibilidad a la corrosión la hace menos adecuada para entornos agresivos o donde se requiera protección contra la oxidación. Aun así, con el tratamiento adecuado, como recubrimientos o aceites protectores, puede ser una opción confiable y duradera para proyectos que no requieran las características de materiales más costosos.