Utilizado en aplicaciones especializadas que requieren una sujeción firme y precisa, donde la cabeza del tornillo es plana o tiene una forma que permite un ajuste limpio y seguro. La rosca fina permite una mayor resistencia y un mejor rendimiento en materiales más duros o cuando se requiere un ajuste preciso. Este tipo de tornillo es común en maquinaria, equipos automotrices y sistemas de fijación en los que la precisión y la fuerza son clave.